jueves, noviembre 02, 2006

Viaje de estudios

La profesora cerró la puerta de la sala con llave. Los alumnos la observaban en silencio, cautivados por su presencia.
Tomó un pan de tiza y dibujó una puerta en el pizarrón. Sacó una pequeña llave que colgaba de su gargantilla y la apoyó contra el dibujo de la cerradura. Empujó suavemente y la puerta se abrió, dejando entrar luces de muchos colores y un suave olor dulzón.
Uno por uno, los niños cruzaron el umbral, cada uno con una expresión de asombro en los ojos.
Cuando la sala estuvo vacía, la profesora cruzó y cerró la puerta tras ella.

2 comentarios:

Carolina Castro Varela dijo...

pensé que sería un final predecible, pero me logró tomar por sorpresa

saludos!

Anónimo dijo...

Bueno tu Blog Juanjito
Un Besito
La Nancyta
PD: Yo tengo uno too, pero es más latero porque es de mi..
Cariños